
La actividad hotelera y la vacacional en particular, es absolutamente incompatible con las medidas de restricción de movimientos y de confinamiento domiciliario
Esta visión ‘adelantada’ ha permitido prácticamente en un tiempo récord poder repatriar a todos los turistas y clientes que disfrutaban de su estancia en los establecimientos hoteleros. Según la estadística que hemos cerrado, el volumen de hoteles y alojamientos turísticos que han programado su cierre es el siguiente: Los establecimientos que permanecen abiertos no lo hacen a plena capacidad, sino que permanecen abiertos para atender a los pocos clientes que todavía se encuentran alojados esperando su vuelo de salida o su transporte a su lugar de origen. Según Hosbec, la actividad hotelera y la vacacional en particular, es absolutamente incompatible con las medidas de restricción de movimientos y de confinamiento domiciliario de la población decretada por el Gobierno el pasado sábado en un Consejo de Ministro extraordinario. Y haber permanecido abiertos hubiera sido una temeridad que pondría en peligro no sólo a los clientes, sino a trabajadores y a la población en general.
Por este motivo no entendemos los retrasos del Ministerio de Sanidad o del Consejo de Ministros en declarar el cierre obligatorio de los establecimientos hoteleros y de alojamiento turístico sea cual sea su modalidad y clientela. Si hemos conseguido desalojar a 40.000 clientes en la Comunidad Valenciana, mucho más sencillo debe ser alumbrar una norma jurídica bastante sencilla y que además está siendo demandada por el sector de forma urgente. Las excepcionalidades (hoteles que atienden servicios esenciales para la comunidad) no pueden condicionar la norma general, y deben tener un tratamiento específico, ha indicado la patronal hostelera.
En opinión de los técnicos de Hosbec, este cierre debería alcanzar también a los campings que albergan a miles de turistas que tienen en sus caravanas y autocaravanas su vivienda habitual durante los meses de invierno. La imposibilidad de controlar que en su interior se cumplen las medidas de aislamiento, los aseos compartidos y comunes que usan la mayor parte de ellos, así como la edad de los turistas (+65 años) que los sitúan dentro de la población de riesgo, hace que se deba organizar su cierre ordenado a la mayor brevedad posible, han añadido. EFE